Reunión entre la ADC y el relator de Naciones Unidas para el derecho a la privacidad
La Asociación por los Derechos Civiles (ADC) mantuvo una reunión con Joe Cannataci, relator especial del derecho a la privacidad de Naciones Unidas (ONU) en la marco de la visita del funcionario a la Argentina para evaluar la situación en la materia.
Durante el encuentro, manifestamos las principales preocupaciones de la organización en relación al estado de la privacidad en el país. Nuestros comentarios se focalizaron en tres aspectos. En primer lugar, remarcamos la necesidad de actualizar la legislación de protección de datos personales en tanto el objetivo sea aumentar las garantías existentes. En segundo lugar, señalamos con preocupación el creciente uso de tecnologías de vigilancia por parte de las autoridades públicas para fines de seguridad e investigación, con particular énfasis en el reciente sistema de reconocimiento facial del gobierno porteño. Por último, indicamos que se requiere una inmediata reforma del sistema de inteligencia para dotarlo de mayor transparencia, rendición de cuentas y respeto a los derechos humanos.
Luego de su visita de 12 días, el relator emitió un comunicado oficial en el cual dio cuenta de sus opiniones preliminares acerca de la situación en Argentina y también brindó recomendaciones a las autoridades para incrementar el actual nivel de protección.
En dicha declaración, el funcionario se refiere a varias de las cuestiones que fueron mencionadas en nuestro encuentro. La sugerencia de adoptar una legislación comprehensiva para el uso de datos personales por parte de las fuerzas de seguridad son coincidentes con una preocupación largamente señalada por la ADC. Asimismo, la necesidad de cambiar las prácticas culturales de los servicios de inteligencia y de establecer mecanismos de supervisión más efectivos ha sido una línea del trabajo llevada a cabo por la organización.
Finalmente, reconocemos el valor de recomendaciones como la de efectuar evaluaciones de impacto en privacidad antes del establecimiento de cualquier tecnologías de vigilancia. No obstante, consideramos que esta medida debe ser solamente el inicio de un conjunto amplio de acciones que deben tomar los gobiernos para evitar que el uso de tecnologías tan sensibles e invasivas pueda derivar en una afectación al derecho a la privacidad de las personas.