El derecho a la educación inclusiva – Información útil para las familias
Poner en acción un verdadero sistema de educación inclusiva requiere movimientos en tres dimensiones: políticas, culturas y prácticas. Sin lugar a dudas, las familias son un espacio privilegiado para la creación de una cultura que ya no solo respete, sino que valore la diversidad. En relación con las prácticas, tantos años de segregación educativa de personas con discapacidad o –en el mejor de los casos- de acciones ¨integradoras¨, nos han llevado a naturalizar cantidad de prácticas que deben ser modificadas.
Este Manual para Familias tiene efectos en ambas esferas: brinda información para que cada familia pueda ser un motor generador de una cultura más inclusiva y, a la vez, cuente con elementos que le permitan detectar esas prácticas que deben ser cambiadas para que todos/as y cada uno/a de los y las estudiantes puedan acceder a la escuela y participar en ella con igualdad de oportunidades.
Pero es en el terreno de las políticas públicas donde creemos que este Manual tendrá mayor incidencia. Porque es imprescindible que las familias conozcan efectivamente sus derechos y tengan la información necesaria para lograr su respeto. De ese modo -además de contar con los recursos para asumir la responsabilidad en las acciones educativas que el art. 6 de la Ley Nacional de Educación les reconoce como ¨agentes naturales y primarios¨ de la educación-, toda política pública o práctica institucional que pretenda desconocer el derecho a la educación inclusiva que hoy tiene jerarquía constitucional, se encontrará con familias informadas, conocedoras de sus derechos y con recursos para hacerlos valer.